1. Inicio keyboard_arrow_right
  2. Noticias keyboard_arrow_right

Industria creativa para el desarrollo

27 de julio de 2022


Columna de Pedro Bouchon Vicerrector de Investigación UC y Presidente del Consejo Directivo del Centro de Innovación UC. La publicación original fue realizada el 27 de julio del 2022 en El Mercurio. Las oportunidades que ofrece la industria creativa para diversificar nuestra matriz productiva son muy relevantes. ¿A qué nos referimos? A las actividades cuyo valor creativo […]

Columna de Pedro Bouchon Vicerrector de Investigación UC y Presidente del Consejo Directivo del Centro de Innovación UCLa publicación original fue realizada el 27 de julio del 2022 en El Mercurio.

Las oportunidades que ofrece la industria creativa para diversificar nuestra matriz productiva son muy relevantes. ¿A qué nos referimos? A las actividades cuyo valor creativo es central, como por ejemplo ocurre en la música, las artes visuales y escénicas, la literatura, la industria del entretenimiento -como la televisión o los videojuegos-, la publicidad (en sus múltiples formatos), y ciertamente, el sinfín de posibilidades que habilita la tecnología.

En efecto, el desarrollo de la industria creativa se ve crecientemente apoyado por tecnologías emergentes como la inteligencia artificial, la realidad aumentada, la computación cuántica o la impresión 3D. Pero también puede interactuar con otras menos evidentes, incluyendo la biotecnología, el biomimetismo o la biología sintética.

Para dimensionar las posibilidades, en el Reino Unido, esta industria representa cerca del 6% de la economía, a poca distancia del reconocido sector financiero (8.6%); mientras que en Chile significa cerca del 2%. No sólo eso, además de su importante rol cultural, tiene potencial de acelerar el crecimiento y la transición tecnológica-digital de las industrias con las que interactúa, y también ampliar el crecimiento de industrias tradicionales, a través de, por ejemplo, la inclusión de realidad virtual para proyectar futuros desarrollos industriales o el diseño de experiencia de usuarios.

En este contexto, la industria creativa demanda habilidades que cambian muy rápido, lo que puede generar un desequilibrio entre el conocimiento y la capacitación provista por la educación formal y la que el mercado necesita, como señalan Benavente y Grazzi (2017). Por ende, se debe fomentar la capacidad de aprendizaje continuo, de absorción y de análisis de nuestros jóvenes talentos, con flexibilidad. Asimismo, es un sector altamente rico en capital humano, que debe incluir diversas ópticas para abordar los desafíos, por lo que la capacidad de trabajar en forma interdisciplinaria y en equipo es relevante.

En esta necesidad de convergencia de capacidades, las universidades son fundamentales, pues entregan espacios de formación en torno a la innovación y emprendimiento, a la investigación y la facilitación de plataformas que contribuyen a la exploración de proyectos de alto valor para las mismas industrias creativas o para el desarrollo de nuevos negocios.

Finalmente, existe una gran oportunidad en facilitar plataformas que impulsen el emprendimiento en industrias creativas, considerando que las micro y pequeñas empresas constituyen el 79% del sector según el “Estudio de caracterización de empresas MIPE creativas en Chile”, publicado recientemente por Corfo.

Revisa la versión impresa aquí.