8 de mayo de 2020
Son diversas las iniciativas que se están desarrollando en el país, y particularmente en la Universidad Católica, para ayudar en la emergencia sanitaria provocada por el Covid-19. En esta línea el FabLab del Centro de Innovación UC está trabajando en diferentes proyectos dentro de los cuales destacan un protector facial de rápida fabricación y una cámara que impide el contagio del virus entre pacientes y personal de salud.
Ante la necesidad de suplir la falta de equipamiento, se diseñó un protector facial de rápida impresión 3D, adaptado de un modelo de la plataforma internacional Coronavirusmakers, el cual reduce su impresión a la mitad del tiempo.
“Donde exista una impresora 3D, existe un potencial aporte a la emergencia sanitaria, porque cualquier persona podrá imprimir y armar estos protectores, esa es la virtud de la fabricación digital” comento Conrad von Igel, Director Ejecutivo del Centro de Innovación UC, sobre este protector el cual ya está liberado para su uso en el sitio web del Centro de Innovación UC.
Esta propuesta se fabrica en 50 minutos, permitiendo además la producción simultánea de cuatro protectores, con una simplificación del ensamblaje. Adicionalmente, el modelo tiene versiones optimizadas, es decir, se adaptada a las distintas impresoras 3D -según el diámetro de boquilla de cada una-, lo que permite agilizar todavía más el tiempo de fabricación.
Actualmente, el equipo trabaja en un modelo troquelado del protector facial que permitiría la fabricación de miles de mascarillas diarias y escalar a la producción en masa.
Puedes descargarlo en este enlace.
Con el fin de dar seguridad al personal de la salud al momento de trabajar con pacientes contagiados con Coronavirus, se fabricó en conjunto a la Red Salud UC CHRISTUS una cámara de policarbonato que permite el cuidado médico mientras cubre el rostro y cuello de la persona, impidiendo el traspaso de fluidos, como saliva o aerosoles, y previniendo la transmisión del virus.
Adaptado de un modelo desarrollado en Taiwán, el artefacto es un elemento alternativo de protección para los profesionales de la salud, que sirve especialmente cuando deben realizar procedimientos de alta exposición a los pacientes infectados con Covid-19, como la intubación o la realización de exámenes. A su vez, la cámara se fabricó tomando en cuenta que el proceso de esterilización debe ser fácil y rápido.
El principal beneficio de este dispositivo es prevenir los contagios en el momento de la intubación/extubación, que es donde más aerosoles se generan y donde el personal de salud está más expuesto a contraer el virus.
La cámara está disponible con código abierto y se puede descargar en este enlace.
En conjunto a la Red de FabLab (o talleres de fabricación) de la UC, las Escuelas de Diseño y Medicina se desarrollaron protectores de cara, tipo máscaras que, de contar con las certificaciones necesarias, podrían ser usados en la red de salud de todo Chile. Las cuales fueron realizadas con insumos de fabricación chilena.
Si bien en una primera instancia el académico de la Escuela de Diseño, Iván Caro, trabajó en la adaptación de máscaras de buceo para que pudieran ser usadas con fines clínicos, hoy el proyecto es más ambicioso. Y es que el principal problema que se presentaba con la reutilización de estas máscaras es que hay muy pocas de ellas disponibles, tanto en Chile como en el extranjero.
Actualmente, en el proyecto participa la doctora Carolina Soto del Hospital de Urgencia de Asistencia Pública (ex Posta Central), académicos de las facultades de Arquitectura, Diseño y Estudios Urbanos, Medicina, de Ingeniería, del Centro de Innovación y personas de la empresa privada Fosko.
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